Los 76ers se dieron un festín en Houston. La quinteta dio un paso al frente en su objetivo de ganar la Conferencia Este y sin excesos de confianza pasó por encima de unos Rockets que ya sólo buscan cerrar con dignidad la campaña. 135-115 finalizó la pizarra.
El último cuarto estuvo de más, la distancia se amplió, entraron los reservas visitantes y Houston tiró la toalla, llegó la derrota número 50 de 2020-21. Cada embestida de los pupilos de Doc Rivers se convirtió en garantía de daño, desde la pintura, los visitantes sumaron 58 al marcador, 10 más que sus rivales.
Filadelfia prácticamente encabezó todas las categorías: rebotes, robos. En la efectividad de tiros de campo superaron en el porcentaje 53.2 a 44.7.
Los 76ers prolongaron su racha de victorias consecutivas a seis. Se despegaron a dos partidos de Nets a falta de 10 días para que culmine la fase regular, esa ventaja es prácticamente de tres juegos, ya que ganaron la serie particular.