La ciudad de Manaos, en la Amazonia brasileña, registró una oleada de violencia luego de que la policía abatió al presunto narcotraficante Erick Batista Costa, alias Dadinho.

Las autoridades suspendieron las clases y el transporte público en medio de una ola de vandalismo.

Decenas de autobuses, edificios públicos, bancos y 21 vehículos particulares fueron atacados por una organización de tráfico de drogas en represalia por el asesinato durante un tiroteo con la policía, según el gobierno del estado de Amazonas.

Ante eso, el gobernador Wilson Lima solicitó el despliegue de la guardia nacional.

Ayer, el secretario de seguridad del estado de Amazonas, Louismar Bonates, dijo que los ataques fueron ordenados desde grupos que operan la cárcel.

El traficante fue asesinado por la policía durante un enfrentamiento la noche del sábado en un operativo en el barrio Redenção, al oeste de Manaos, reportaron ayer las autoridades locales.

Los asaltantes arrojaron bombas de gasolina en estaciones de autobuses y bancos y también quemaron llantas.

Por temor a los ataques, los comerciantes cerraron sus tiendas. No hubo informes de heridos.

Hasta el momento han sido arrestadas 29 personas sospechosas de llevar a cabo los ataques, según la secretaría de seguridad del estado de Amazonas.

Hemos reforzado enormemente las patrullas’’, informó Bonates, y agregó que la policía ha establecido puntos de control en la capital y el estado.

 

Por editor