Conoce todo sobre el Pueblo Mágico más pequeño de México, cuna del árbol de la vida

A una hora y media de CDMX encontrarás el Pueblo Mágico más pequeño de México. Se trata de Metepec, un rincón encantador que te sorprenderá por su diversidad cultural y gastronómica  que lo convierten en una parada obligatoria para todo viajero.

Metepec es uno de tantos atractivos que se alojan en el Estado de México. Visitar este destino significa estar en la cuna del árbol de la vida, una de las piezas artesanales más representativas de México, por lo que en  2012, se incorporó al programa de Pueblos Mágicos.

Y aunque se trata de un lugar pequeño, de tan solo 70.34 kilómetros cuadrados de superficie, alberga una riqueza histórica que sí o sí tienes que conocer. Por ello, si eres fan de turistear entre Pueblitos Mágicos, en Destinos te damos las razones suficientes para visitar Metepec.

Metepec, la historia del Pueblo Mágico más pequeño de México

Viajamos al pasado hasta 1477. Según cuenta la historia, el tlatoani azteca Axayácatl conquistó gran parte de lo que hoy es Toluca y sus alrededores, uno de ellos, Metepec. Más tarde, con la llegada de los españoles, la encomienda quedó a cargo de Juan Alonso Gutiérrez, primo de Hernán Cortés.

Así, el Pueblo Mágico pasó a ser San Juan Bautista Metepec. Y fue hasta el siglo XVI cuando se construyó el Convento de San Juan Bautista, la capilla del Espíritu Santo y la capilla de la Purísima Concepción en San Miguel Totocuitlapilco.

El nombre de este Pueblo Mágico proviene del náhuatl metepētl, que significa “en el cerro de los magueyes”. De ahí que en su cerro se edificó la ermita del Tepeyac, sobre los vestigios de un antiguo templo mexica.​

Con el paso del tiempo, Metepec se consolidó como uno de los lugares más representativos del Estado de México.

Y es que la principal actividad del municipio es la artesanía. Por lo que su ambiente bohemio es ideal para pasear entre sus corredores de tabacaleros y sopladores de vidrio.

Durante tu estancia, no dudes en visitar la Casa del Artesano. Aunque lo suyo lo suyo es la alfarería, pues hay más de 300 artesanos y 270 familias que se dedican a esta actividad, de acuerdo con información de la Secretaría de Turismo del Estado de México

Al recorrer sus calles notarás la arquitectura caprichosa de Metepec, donde se combinan construcciones modernas y edificios coloniales. Para muestra están la Iglesia del Calvario de estilo neoclásico y el convento franciscano, construido por artistas indígenas, que te maravillará con su fachada barroca.

¿Qué encontrarás durante tu visita a Metepec?

Además de sus corredores artesanos de donde querrás llevarte más de un recuerdito, como los “Árboles de la vida”, no te puedes perder la oportunidad de pasear por los barrios de Santiaguito, Santa Cruz, San Miguel o San Mateo. Así como por las capillas e iglesias coloniales.

En la cabecera de Metepec se encuentra la Plaza Juárez o Cívica. Asegúrate de visitar la Tlanchana, una fuente esculpida en barro y con forma de sirena que se ilumina por las noches.

¡Alista la cámara! Si tienes alma de aventurero, en Metepec es obligatorio conocer el “Cerro de los Magueyes”, el cual es un Área Natural Protegida. En este lugar se realizan caminatas, ciclismo de montaña o simplemente puedes subir a disfrutar de la vista del municipio, incluyendo la Capilla del Calvario.

Date una vuelta por la Casa de Cultura, un espacio para aprender sobre las tradiciones y costumbres de Metepec. Ahí también se imparten talleres; puedes aprender a hacer artesanías, se hacen conciertos, festivales y exposiciones sobre la importancia de este Pueblo Mágico.

A 15 minutos de la cabecera municipal de Metepec está el Zoológico de Zacango. Un lugar apto para grandes y pequeños amantes de convivir con la naturaleza, ya que cuenta con especies exóticas de todo el mundo.

Deleita tu paladar con la gastronomía de Metepec

Todo viajero sabe que la mejor manera de conocer un lugar es probando su gastronomía, por lo que en el tianguis encontrarás la “ensalada de plaza”, los tacos placeros y la garañona, una bebida tradicional de Metepec que llama la atención por su color verde fluorescente. Se trata de un elixir secreto preparado con hierbas, limón, cedrón y miel. Aseguran que es afrodisíaca.

En el centro de este Pueblo Mágico también hallarás puestos de antojitos típicos, como barbacoa de borrego, tamales de charal, sopa de hongos, mixiote de conejo y platillos con chorizo verde y maíz azul. Y si te queda un huequito, podrás deleitarte con pan de pulque.

¿Cómo llegar al Pueblo Mágico más pequeño de México?

Desde CDMX te tomaría alrededor de 1 hora con 15 minutos llegar a la cabecera municipal. Sin embargo, el tráfico en horas pico está muy cargado. Deberás tomar la autopista Marquesa/ México 15D y luego la Carretera Toluca – México.

Opciones para hospedarse hay muchas, desde los hoteles tradicionales hasta pequeñas posadas acogedoras situadas en haciendas. Seguro encuentras una que se adapte a tu presupuesto, pues los costos van desde los $450 pesos por noche.

No hay pretexto para no visitar Metepec, es el destino ideal para escaparte un fin de semana y conocer cada uno de sus rincones.

Por admin

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