Focos, cámaras, asistentes de voz o incluso electrodomésticos empiezan a cobrar mayor relevancia en México. De acuerdo con Statista, en la actualidad hay 7,000 millones de dispositivos conectados en la región y esperan que para 2025, en Latinoamérica, existan 22,000 millones de smart devices. Esto significa un crecimiento de 200% con respecto a 2020.
La tendencia ha permeado en el país desde 2020, cuando la pandemia por covid-19 orilló a muchos usuarios a tener un enfoque más centrado en sus hogares, de acuerdo con Bruno D´Alleva, director de Ring para México y América Latina. Además, ve que el interés por tener hogares conectados está relacionado directamente con la necesidad de que sean más seguros.
“En la región los usuarios están usando las cámaras inteligentes para tener un monitoreo más cercano de mascotas, pero también de sus hogares, pues muchos están volviendo a las oficinas y cambiaron los hábitos que habían al interior de sus hogares, los hicieron más suyos”, apuntó D’Alleva.
Una encuesta por Ring apuntó que 50% de los mexicanos afirmó que tiene algún dispositivo WiFi instalado en su hogar que hace su casa más inteligente. Los encuestados señalaron que servicio de voz (42%), focos inteligentes (21%) y cámara de seguridad (16% ) son los más recurridos en domótica.
Mientras que Statista predice que el uso principal que se les dará a este tipo de dispositivos es el de vigilar, estima que 17,500 millones de dispositivos estarán destinados para este fin sólo en América Latina, hacia 2026.
La encuesta de Ring señaló que las personas que aún no adquieren un dispositivo lo harían por dos motivos: cuidar la seguridad de su hogar y monitorear a sus mascotas cuando no están en casa, por trabajo o por viajes.
“La categoría de seguridad y hogar inteligente en este sentido tiene mucho para crecer en la adopción de nuevos usuarios y el lanzamiento de nuevas soluciones. Si bien la seguridad es uno de los principales motivos, surgen otros usos y necesidades como confort, comodidad y el cuidado de mascotas”, apunta el vocero de la empresa de smart home.
Los retos en el despliegue de este sector
Uno de los desafíos que identifica D’Alleva es que, en el caso de los timbres inteligentes, la inseguridad que se vive en algunas ciudades de la región provoca que muchos usuarios no quieran adquirir un equipo de este tipo.
“Es cierto que en la región padecemos este tema, tanto de que se roben un equipo como de que lo maltraten. Sin embargo, hay desde accesorios para protegerlo, hasta garantías al momento de hacer la compra donde es posible reponer el producto si es vulnerado”, apuntó el vocero de la marca.
Además del tema de seguridad, uno de los limitantes que identificaron es la falta de conexión en el país.
“El 98% afirmó que le gustaría incursionar en hacer de su hogar uno inteligente, mientras que el resto señaló que sus principales impedimentos son la falta de WiFi en su hogar; la complejidad en el funcionamiento; costos elevados y protección de la privacidad de su hogar” apunta el informe.
Y sólo 21% afirmó tiene instalado un dispositivo de seguridad en su hogar, aunque algunas de las soluciones son más tradicionales:
● Cámara de seguridad (44%)
● Video portero (16%)
● Automatización de portones (7%)
● Otros: chapa inteligente, herrajes de seguridad y sistemas de monitoreo.