En el nuevo reporte de la Secretaría de Salud, se informó que la Ciudad de México acumula 56% de los 252 positivos a la enfermedad.
El número de casos confirmados de viruela del mono en México pasó de 147 a 252 en una semana, de acuerdo con el informe más reciente de la Secretaría de Salud.
Las cifras representan un alza de 71.4 por ciento en los casos con prueba positiva por el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (InDRE).
La dependencia agregó que con corte al 15 de agosto, se han notificado 610 casos que “cumplen con la definición de un caso probable”. De estos, 131 permanecen aún en estudio y se descartó la presencia del virus de la viruela del mono en otros 227.
Hasta ahora, la Secretaría de Salud confirma que ninguna persona ha muerto por este padecimiento en nuestro país.
La viruela del mono, por estados
La Secretaría de Salud reportó que el número de entidades con casos confirmados pasó de 18 a 20, después de que Chihuahua y Morelos reportaran sus primeros contagios.
Por entidades, la Ciudad de México se mantiene como la que más casos confirmados pues acumula casi 56 por ciento de todas las infecciones reportadas en México, es decir, 141 de las 252.
Jalisco y Yucatán son las siguientes dos entidades que rebasan la decena de infecciones confirmadas, con 46 y 15, respectivamente. Quintana Roo, el Estado de México aparecen después con 9.
La dependencia agregó que 94 por ciento de los casos confirmados de viruela del mono pertenecen a hombres, y el grupo más afectado es el de 30 a 39 años, con 115 de los 252 casos confirmados.
Entre las acciones para prevenir contagios recomendadas por las autoridades sanitarias están:
- Lavarse las manos con agua y jabón de forma frecuente.
- Cubrir nariz y boca al estornudar o toser. Cuando se esté físicamente cerca de un enfermo, usar cubrebocas, especialmente si está tosiendo o se tiene lesiones en la boca.
- Evitar compartir alimentos, bebidas, cubiertos y platos.
- Lavar la ropa, toallas, utensilios para comer y sábanas que hayan estado en contacto con una persona enferma, utilizando agua tibia y detergente.